Ponga en práctica las siguientes reglas elementales para usar los cajeros automáticos con seguridad:
1. Entérese muy bien acerca del funcionamiento de estos equipos que tanto facilitan las diligencias bancarias.
2. Cuando opere un cajero, no acepte la ayuda de ningún extraño. Si tiene dudas, preferiblemente absténgase de realizar la transacción o ingrese al banco y pida apoyo.
3. Por ningún motivo permita que nadie se ubique detrás suyo, muy cerca, observando sobre sus hombros y quizá tomando nota acerca de los datos que introduce.
4. Nunca olvide su tarjeta. Retírela inmediatamente de la máquina y guárdela siempre en lugar seguro.
5. No lleve escritas las claves de acceso; memorícelas.
6. No se retire del cubículo cuando todavía no se ha cerrado la transacción.
7. No realice ninguna operación si observa aditamentos extraños instalados sobre el cajero.
8. No acepte presiones de ninguna clase. Esta podría ser una artimaña de los delincuentes para que olvide su dinero o su tarjeta o para que no concluya con seguridad lo que hacía.
9. Conserve las tirillas o destrúyalas por completo y deséchelas.
10. Antes y después de usar el cajero observe los alrededores y confirme que las condiciones sean seguras.
11. Periódicamente, sobre todo si tiene dudas acerca de las transacciones efectuadas, pida un miniextracto y lleve su propio control de operaciones. Reclame si observa diferencias. Usted tiene derechos inviolables como cliente bancario.